Día Primero: LA HUMILDAD
He aquí que homo vio la luz, tomó conciencia de sí mismo y apareció la humildad. -Soy uno más de los habitantes de este planeta. Esta casa no es mía. Sólo soy un inquilino provisional. Toda vida es importante y todos nos necesitamos para sobrevivir.
La humildad se mezcló con la curiosidad y la responsabilidad y homo inició la creación.
Día Segundo: EL RESPETO
Y el segundo día homo observó el firmamento. Respiró el aire fresco de la atmósfera y admiró la belleza del cielo. Y dijo:
-Debemos mantener este aire limpio porque de él depende la vida de todos. Es importante cuidar este firmamento, los astros que iluminan la noche y la atmósfera que nos protege de las radiaciones.
Así fue como homo evitó la contaminación por gases o ruidos. Legisló para proteger este medio y educó para un consumo equilibrado y responsable. Entonces aparecieron el respeto y la alegría.
Día Tercero: LA GRATITUD
El tercer día, homo vio la belleza de la Tierra y se dio cuenta de sus riquezas. Así es que dijo:
- Edificaré con cuidado mis estancias en la Tierra. Intentaré construir viviendas ecológicas que se alimenten de energía limpia. Respetaré la naturaleza e intentaré que mi paso no suponga destrucción. Recibiré con gratitud los dones de la madre Tierra y los compartiré con equidad.
Y aparecieron la prudencia, la generosidad y la solidaridad entre los humanos y el resto de seres vivos.
Día Cuarto: EL EQUILIBRIO
El cuarto día, homo se fijó en la belleza y grandeza del mar. Y dijo:
-Tendremos un cuidado especial de estos parajes. Gestionaremos nuestros desperdicios de forma que no ensucien las aguas. Utilizaremos con sensatez los recursos del mar para nutrirnos y evitaremos su explotación desenfrenada.
Y apareció el equilibrio y homo vio que aquello era bueno.
Día quinto: LA COMPASIÓN
El quinto día, homo vio que había muchos animales viviendo en el planeta, animales libres y nobles que jugaban al sol y corrían por los prados. Y homo dijo:
- Crearemos amplios espacios protegidos donde todas las especies encuentren su lugar en libertad. Haremos un uso noble de los recursos que nos dan para nutrirnos y para la investigación.
Y entonces apareció la compasión y la convivencia pacífica entre las especies. Y homo vio que esto era bueno.
Día sexto: LA CONVIVENCIA PACÍFICA
El sexto día, homo vio otros seres homos de todas las razas, costumbres y lenguas. Y apareció el impulso de aprender de los demás, de relacionarse y compartir en confianza. Y dijo:
- Conviviremos juntos en paz y nos ayudaremos a crecer respetando la manera que le sea propia a cada uno.
Y así fue como nacieron la amistad, la ternura y el amor.
Día séptimo: EL AMOR
He aquí que el séptimo día homo descansó del trabajo hecho... Y la Tierra quedó tranquila porque homo había hallado la armonía en su interior, en sus relaciones con los demás y con la naturaleza. El ser humano entraba en una etapa de humanización amorosa y creativa. Y así fue como la VIDA dio un gigantesco paso hacia adelante.
ECOLOGÍA EMOCIONAL para el nuevo milenio.
El arte de reinventarse a uno mismo.
Mercè Conangla y Jaume Soler.