Día 18:
Un, dos, tres ... ¡acción!
- ELLA: Hola... ¿qué haces?
- YO: Recojo y lanzo piedrecitas.
- ELLA: ¿Y a dónde las lanzas?
- YO: ¡A donde caigan!
- ELLA: ¿Puedo ayudarte?
- YO: Si te apetece...
La mañana la he pasado de puesta en escena, cruzando una línea de cojines que separaba la realidad de algo parecido al teatro. Y no he estado sola. La experiencia de crear escenario la he compartido con un grupo de gente que no conocía, pero con la que me he sentido como en casa. Y así, con esta estrenada familia, he representado unas cuantas incursiones dentro del espacio.
Nos hemos dejado sentir en el cuerpo, en la mente y con el alma; sin juicio, sin crítica y con energía. Cada uno, con lo suyo ha construido lo que ha podido. Y, después, al acabar, nos hemos despedido con un sincero Hasta Luego!
La tarde la he dedicado a buscar mi sonrisa. Después de todo, andaba un poco perdida y cuando la he encontrado he hablado seriamente con ella para que no volviera a desaparecer entre lágrimas sin sentido. La he abrazado fuerte también porque he intuido que lo necesitaba. Y poco más. He dejado todo lo que no es importante para otro momento y me he puesto a descansar.
Un petit descobriment dins del Taller de Teatre Terapèutic:
http://transformart.wordpress.com/
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