EL CUERPO TIENE SUS RAZONES, LA MENTE TAMBIÉN TIENE LAS SUYAS. LA PROPUESTA ES QUE SEPAN INTEGRARSE SIN CREAR CONFLICTO
Día 22:
Hoy para aprender a jugar un poco más con las palabras, me he entretenido con un libro muy especial. Trata de princesas y de calabazas, de príncipes y de charcas con ranas, de algún garbanzo y alguna que otra manzana de árbol. Me ha gustado mucho que las historias no tuvieran un principio ni un final cualquiera. También que se pudieran masticar dulcemente, sin prisa y saboreando... Que fueran capaces de mirarse desde diferentes puntos de vista y pintarlas o recortarlas, para tirarlas y no querer saber nada más de ellas, me ha resultado igualmente estimulante. Si no os lo acabáis de creer... aquí dejo un botón de muestra, buen provecho!
Vet aquí que una vegada, un príncep va trobar una princesa...
...algunes noietes de la cua del lavabo es van oferir per casar-se amb ell, però cap li va fer el pes. De fet alguna cosa li deia que ni tan sols la princesa dormilega feria per a ell, per això es va pujar al seu cavall i se'n va anar camí enllà.
...el príncep encantat va marxar amb un pam de nas. I quan ell va ser fora... la princesa es va tallar la trena.
...no volia passar ni una nit més en aquell castell. Un cop més, el príncep va rebre carbasses. I com a consol, es va menjar un bon plat de cigrons, inclòs el que hi havia sota la pila de matalassos.
Y si habéis masticado bien, ya no hará falta que os recuerde qué cuentos tradicionales se esconden detrás de la sorpresa...
M'han donat carbasses! Ester Llorens i Jordi Palet (contes creatius).
La Pegatina. El cáliz de fuego.